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Relato juevero: Otoño

¿Os podéis creer que escribí el relato a tiempo, pero se me pasó completamente colgarlo?
Bueno, queridos lectores, como podéis comprobar, ¡volvemos con los Relatos Jueveros! Si mi memoria me lo permite, claro.  Esta vez toca celebrar el Otoño, esa época del año tan evocadora por sus colores, el frío que llega, las lluvias... ¿Con ganas de leer el relato?
No os entretengo más: hasta la siguiente entrada, ¡y espero colgar el siguiente en el plazo de la convocatoria!


OTOÑO
—Más naranja. Tiene que quedar así de brillante. 
—Como desee —asintió el pintor, mirando alternativamente la imagen que le señalaba y el bote de pintura que sostenía entre las manos—. Puedo añadirle un tono ligeramente dorado que seguro que le encantará. 
Asentí, entusiasmada por su propuesta. Acababa de mudarme a aquella casa, alejándome todo lo posible de la capital, pues quería dedicarme de lleno a mi trabajo como escritora sin que me molestasen los ruidos de los coches, la algarabía de las calles, de los bares, de las tiendas que parecía que nunca cerraban...  
—¿Qué signo del zodiaco es, por curiosidad? —me preguntó mientras se disponía a trabajar, abrochándose el mono hasta arriba y colocando correctamente los plásticos sobre los escasos muebles. 
Yo estaba sentada en un taburete en el centro de la sala con mi cuaderno y la pluma sobre el regazo, también lista para dedicarme a lo que más amaba.
—Soy tauro —respondí, ligeramente confundida.
El pintor asintió, como si eso lo explicase todo, y mientras pasaba el rodillo sobre la pared dijo:
—Solo una tauro querría las paredes de su cuarto de color naranja. 
No pude evitar reír, y me sentí un poco menos sola desde que había dejado a mi familia y a mis amigos en la ciudad.
—¿A ti no te gusta el naranja, o qué? —Apenas me di cuenta de que lo había tuteado, él se giró con la misma complicidad pintada en el rostro; debía tener más o menos mi edad, y poseía unos ojos tan azules que si no los estuviera viendo en persona no los creería. 
—Nací en otoño. Adoro el naranja. 



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12 comentarios:

  1. Este Otoño que nos ofreces ..no sé me da que trae Amor ..
    SENCILLO pero precioso .
    Un abrazo guapa feliz semana.

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    1. Este otoño... y en invierno, verano, primavera... ¡Siempre es tiempo de amor!
      ¡Que pases un buen fin de semana!
      Un abrazo

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  2. Bien contado.
    Naranja, un color cálido para el otoño.
    Me parece certero el comentario de Campirela.
    Un abrazo.

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    1. ¡Hey, Demi!
      Puede que eligiera el color naranja por alguna razón especial... ;)
      ¡Gracias por pasarte a comentar!
      Un beso

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  3. Lol eso me paso un par de veces cuando me fui de viaje.
    Encantador texto, aderezado con la magia del otoño y su color naranja. Te quedo hermoso el romanticismo con que lo elaborastes. !Love is on the air!
    Un abrazo

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    1. ¿En serio? ¡Cuenta! jajaja
      Me parece curioso que todos estéis ya enamorando a los personajes del relato cuando apenas han intercambiado un par de frases... ¿Quizás debería ampliar su historia? No sé, no sé... No me da la vida con tanto proyecto...
      ¡Un abrazo muy grande, Yessy!

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  4. ¡Hola! ¡Qué bonito texto! En un tiempo, la cocina de mi casa estaba pintada de naranja y el living, que es la misma sala, sólo hay una división mínima en el suelo, era de un naranja más pálido. Da una sensación de calidez y alegría al lugar que me encanta. Me gustó eso de mudarse lejos para escribir ¡a veces hace mucha falta eso! XD

    ¡Un abrazo!

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    1. A mí también me encanta el color naranja *__*
      Ojalá probar lo de marcharse a un lugar tranquilo a escribir... ¿Te imaginas? Sin coches, tecnología ni distracciones innecesarias, solo tú y tu historia. ¡EL PARAÍSO!
      Un besazo, Roxy

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  5. Precioso es tu Otoño, Dafne, con ese color naranja, y aunque no me guste el Otoño, sí me gusta el color naranja, aunque prefiero el color del mar, colores de verano, tal vez porque soy Cáncer, influya.

    Me ha encantado tu relato juevero, y te agradezco, te hayas pasado a mi blog y dejarme un comentario, yo también desde hoy te sigo, que será un placer para mí porque tu blog es precioso.

    Besos y feliz noche.

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    1. No te imaginas la ilusión que me ha hecho tu comentario, María *__*

      ¡Ah! Y eres cáncer... Quizás no debería fijarme en esos detalles (cada persona es un mundo y no es "lógico" pre-definir a la gente por su signo del zodiaco) pero dos de las personas más bellas y buenas que conozco también lo son.

      Gracias también a ti por pasarte y comentar.
      Un besazo

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  6. Esa complicidad natural sin duda hace a un otoño una estación más cálida. Un bonito relato, breve y diría perfecto. Soy Leo, nací en invierno y adoro el violeta.

    Dulces besos violetas y dulce semana.

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    1. Muchas gracias por tus dulces palabras, Caballero.
      Creo que el violeta queda bien en cualquier estación del año ;)
      Dulces besos naranjas ya casi con sabor a otoño

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