Uf, he de decir que casi se me pasa esta fecha tan importante en medio de todos los exámenes universitarios... ¡Menos mal que a mi cerebro le tocó hacer sus sinapsis la semana pasada y me ha dado tiempo a prepararla!¿Que aún no sabéis de qué os estoy hablando?¡Celebramos de nuevo la Semana de Alice!Sí, esa brujita de rizos verdes y ojos dorados -esperad... ¿no era al revés?- y carita de gato que tanto me inspira:ALICE.¿Y qué nos va a deparar dicho festejo este año?Nada más y nada menos que nuevos relatos dedicados a ella, poemas escritos por la mismísima Alice, canciones, dibujos...Y para empezar, una Batalla.Sí, habéis leído bien. Suponiendo que os habéis fijado en el título de la entrada pienso que ya tendréis una idea aproximada sobre la índole de la reyerta que estáis a punto de leer.Hoy las hermanas nos batiremos en un duelo, un Duelo de Damas.Como somos muy literarias, nuestro duelo va a ser, literalmente, a las damas. ¡No os lo podéis perder! ¡Hagan sus apuestas, criaturas indefinidas! Acompañadnos y, sobre todo, disfrutad; doy por seguro que no viviréis un combate igual en vuestra vida.
-DUELO DE DAMAS-
En un extremo de la cama se encontraba Dafne, preparando el tablero. Alice revoloteaba a su alrededor con su vaporoso vestido azul mientras elegía la música que sonaría durante la contienda. ¿Mozart? ¿Chopin? No, mejor escucharán a Beret, que por algo lo habían descubierto hacía relativamente poco tiempo. El rap inundó la sala y Alice pidió a Michael Jackson y a Daryl Dixon, que las observaban desde las paredes azules, que le dieran suerte. Una vez alineadas las guerreras en el campo de madera, la cumpleañera se colocó en el extremo contrario al de su querida hermana.
"¡Me pido las rojas!", exclamó.
"Pensé que pedirías las blancas... ¡Abajo la sangre roja!"
"Era por dar un poco de emoción a la partida..."
"Venga, entonces comencemos."
"Claro, como las mías son de color... ¡Ya les vale! Aún así, voy a ganar."
Y el combate fue iniciado.
NOTA: la numeración del tablero no es la convencional. Desde la perspectiva de Dafne, las filas están numeradas de arriba abajo de la A a la H, y las columnas de izquierda a derecha del 1 al 8.
3F a 4E
4C a 5D
46 a 3F
2C a 1D
4E a 3D
8C a 7D
7F a 8E
5D a 4E
Las combatientes se movían en el tablero deslumbrantes, con sus armaduras de distinto color desteyando y sus cabelleras respectivamente rojas y blancas ondeando al viento. Sus armas entrechocaban, se miraban a los ojos mientras los filos se besaban, tanteándose al principio, midiendo sus propias fuerzas y a sus contrincantes... Hasta que cayó la primera.
3F a 5D *derrota a 4E*
La dama vestida de blanco fue derrotada tras un amago de su adversaria y un error que ella misma cometió, de manera que la pelirroja no dudó un instante en arremeter contra ella. La desarmó. Pasó por encima, moviéndose en diagonal, y la que se encontraba en la casilla 4E se retiró del campo de batalla con un asentimiento de cabeza, aceptando su derrota. Por supuesto, ¿no creeríais que se trataba de un combate a muerte, verdad?
Continuó el desafío.
6C a 2C *derrota a 5D y 3D*
Las damas blancas tomaron represalias y una de ellas aprovechó la mala situación de dos contrarias para derribar a las que se encontraban en las posiciones 5D y 3D. A partir de ese momento sucedieron una baja tras otra.
8E a 6C *derrota a 7D*
7B a 5D *derrota a 6C*
1F a 2E
1D a 3F *derrota a 2E*
2G a 6C *derrota a 3F y 5D*
5D a 7D *derrota a 6C*
5F a 6E
7D a 5F *derrota a 6E*
6G a 4E *derrota a 5F*
Tras la caída de 5 damas blancas y 6 rojas el combate pareció estabilizarse, como si se hubiera negociado un descanso sin falta de decir nada en voz alta. Las compañeras se agrupaban con compañeras, siguiendo la táctica que fuera en ese momento y evitando atacar directamente.
3B a 4C
8G a 7F
4C a 3D
4E a 5D
3D a 4E
7F a 6E
4E a 5F
6E a 7D
2C a 3D
7D a 6C
3D a 6C
5D a 4C
4E a 3F
7H a 8G
1B a 2C
3H a 2G
5F a 4G
Por supuesto, la tregua debía terminar en algún momento.
2G a 4E *derrota a 3F*
Empate. Sin embargo, justo en ese momento una dama blanca consiguió llegar al campo contrario, devolviendo al tablero a una de sus compañeras, la primera caída, pues era la más descansada de todas las derrotadas hasta el momento.
4G a 3H *doble*
Juntas, aferradas de la mano, alzaron sus respectivas armas y se dispusieron a ayudar a las que seguían en pie.
8G a 7F
3H a 1F
7C a 5B
4A a 6C *derrota a 5B*
7F a 6E
1F a 3H
4E a 5D
6C a 4E *derrota a 5D*
6E a 5D
3H a 6E
4C a 3B
6E a 4C *derrota a 5D*
3B a 4A *doble*
2C a 3D
4A a 6C
4E a 5F
6C a 4E
5F a 4G
5H a 3F *derrota a 4G*
3D a 5F *derrota a 4E*
Dafne decididió rendirse.
Como bien dice Beret: 'Si no pierdes el miedo a perder, seguirás perdiendo', y Dafne, siempre que pasaba tiempo con Alice, ganaba.
"Bueno, Alice... ¿Otra partida?"
Como bien dice Beret: 'Si no pierdes el miedo a perder, seguirás perdiendo', y Dafne, siempre que pasaba tiempo con Alice, ganaba.
"Bueno, Alice... ¿Otra partida?"
¡Ay! ¡Qué gracioso! ^_^Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarTe espero por mi blog, un saludo.
Mia
http://sweetcoffeelatte.blogspot.com.es/
¡Gracias!
EliminarUn saludo ;)
Me gustó este duelo de damas y a las damas.
ResponderEliminarMe gustó la precisión de crónica de la partida, a la vez con emoción.
Que bien narrado.
Besos
¡Me alegro de que decidieras pasarte, Demi!
EliminarFue la partida real, que iba apuntando, la que inspiró el relato ;)
Besos
Yo he disfrutado imaginando ese duelo de Damas, he obviado las anotaciones porque los números me marean :D Menos mal que fue de ajedrez :)
ResponderEliminarDulces besos del Caballero.
Duelo de Reinas, entonces ;)
EliminarDulces besos sin números