Inevitablemente, a veces pienso en qué ocurriría si te pasase algo.
En consecuencia me duele todo el cuerpo,
el pecho,
la garganta,
me tiemblan las manos
y las rodillas.
Pienso... y entonces me planteo qué pasaría si de verdad -de verdad de la mala- ocurriera,
pues si sólo de imaginármelo
aun a sabiendas de que estás bien,
de que me esperas en casa con un beso,
tus ojos verdes
y tu sonrisa,
siento morirme por dentro...
Si de verdad -de la mala- ocurriera... ¿de verdad me moriría?
2017
¡Hola! Que fuerte el relato, aunque creo que todos hemos tenido esos pensamientos tan fatídicos alguna vez, al menos yo y si, llegas a ese momento que te lo preguntas pero aún sigues sin encontrar respuesta alguna.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Uf, sí, de vez en cuando es inevitable pensar cosas así... Ciertamente, mi corazón lo ocupan dos personas con las que me ocurre justo lo relatado. Espero no perder a ninguna de las dos.
EliminarGracias por comentar,
¡un besazo!
Nunca se sabe lo que los acontecimientos de la vida nos deparan, pero no hay que vivir con temor a perder a quienes amamos, porque hacerlo nos resta el disfrutarlos en plenitud.
ResponderEliminarDulces besos de manzana.
Totalmente de acuerdo, Dulce.
EliminarA disfrutar de la vida con plenitud...
Un besazo dulce de manzana