Es una redacción obligatoria que tuve que escribir en 2º de la ESO, en lengua, después de que el profesor nos enseñase y nos hiciera
copiar enteras las “Instrucciones para subir una escalera” de Julio
Cortázar.
Los deberes fueron que nosotros escribiéramos unas instrucciones de lo
quisiéramos para el día siguiente, y este fue el resultado:
Instrucciones
para saber cuándo estás enamorada
Te levantas de la cama y al abrir
los párpados tienes su imagen impresa en tu cerebro como si la hubieran taladrado
a tus ojos.
Te mueves.
Después realizas tu rutina y
acaba el instituto. Entonces miras el reloj, impaciente. Faltan dos horas para
verlo, para estar con él otra vez.
Comes, descansas y ves la tele
sin poder sacártelo de la cabeza. Te obligas a ti misma a olvidarlo pero pronto
te das cuenta de que te has puesto la cazadora y que tienes las llaves en tu
mano derecha cuando aún falta media hora para salir de casa.
Te das la vuelta y te fijas en
las manillas del reloj, expectativa hasta que formen ese ángulo tan esperado. El
minutero se mueve por enésima vez.
Te precipitas a la calle y te ves
envuelta por el barullo de gente, rodeada de sus voces efervescentes en todos
los lugares y de sus cuerpos chocando contra ti mientras avanzas en su busca.
Te detienes.
Estás esperando su llegada, pero
cuantas más veces vuelves la vista al lugar en el que se supone que tiene que
aparecer, no está.
Tu corazón late deprisa como
consecuencia de órdenes que emite tu alocado cerebro. ¿Y si no ha venido?
Te encuentras agarrotada e
inquieta por dentro, mirando tu reloj de muñeca sin procesar siquiera la
información.
La incertidumbre crece y poco a
poco te dejas vencer por ella.
Entonces sientes una presencia a
tu espalda; aguantas la respiración involuntariamente y entrecierras los ojos,
convencida de que tu imaginación te vuelve a jugar una mala pasada. Pero luego
una mano te agarra del hombro con dulzura y firmeza y te da la vuelta.
Encuentras sus ojos comiéndote
con la mirada a diez centímetros por encima de ti.
Abres la boca ahogando una
exclamación, pero los dos permanecéis en silencio.
Los niños corren a vuestro
alrededor al salir de clase.
Él tuerce esa media sonrisa que
hace que lo quieras cada día más cuando aparece sobre sus duros labios, y el
barullo aumenta; para ti solo existís los dos en ese momento, solos en el ojo
del huracán.
Consigues decir su nombre,
sintiéndote la más estúpida y feliz del mundo.
—Hola
—responde.
A veces piensas que apenas tenéis
tiempo para hablar, pero luego te das cuenta de que un gesto a veces es
suficiente.
—Hola.
Tú también sonríes.
Dibujo del actor inglés Mitch Hewer |
M.E.H.A.E.N.C.A.N.T.A.D.O.
ResponderEliminarJODER *-*
Un besazo, <333
Me alegro de que te haya gustado jaja
EliminarBesooosss <3
Y todo aquello pasa sin a veces notarlo cuando nos enamoramos, solo nos dejamos llevar. El dibujo excelente, pero eso ya no es novedad cuando se trata de ti ;)
ResponderEliminarDulces besos de manzana y dulce fin de semana Dafne.
Ay, los amores de instituto... Pero las instrucciones se aplican para cualquier etapa de la vida ;)
EliminarGracias de nuevo por comentar "indefinidamente en el tiempo", Dulce.
Dulces besos de manzana y dulce finde